miércoles, 29 de abril de 2015

Tercer mandato para Faure Gnassimbé

Mientras que en Burundi las manifestaciones siguen reclamando la retirada de la candidatura de Pierre Nkurunziza al tercer mandato y mientras la Comunidad Internacional presiona para que se respecten las constituciones en los países donde el presidente no puede superar dos mandatos, en Togo, el problema no ne plantea. La Constitución de este país no limita los mandatos. Un presidente puede ser elegido a todos los mandatos que quiera indefinidamente.
La Comisión Electoral acaba de publicar los resultados de las elecciones de la semana pasada. Según el comunicado, el presidente Faure Gnassimbé volvió a ganar las elecciones con un 56% de votos contra Jean Pierre Fabre con un 34%. Como era de esperar la oposición habla de fraudes y de desacuerdo dentro de los miembros de la Comisión Electoral.
Togo lleva más de medio siglo dirigido por la familia Gnassimbé. Después del golpe de Estado de 1963, un ex - militar del ejército francés en Vietnam, Gnassimbé Eyadema llegó al poder después de matar a su predecesor Sylvanius Olimpio. Desde entonces, el país no ha cambiado de régimen. A la muerte de Eyadema en 2005, su hijo Faure Gnassimbé asumió el poder . Las primeras elecciones de 2005 fueron muy criticadas por la brutalidad de los servicios de seguridad. En 2010, volvió a presentarse al segundo mandato en el que ganó con más claridad según los informes de los observadores. La semana pasada, se presentó al tercer mandato y vuelve a ganar.
Bien es verdad que los métodos de gobierno de Faure Gnassimé son muy diferentes de los de su padre. Durante sus mandatos, se han vistos avances económicos en el país y él presume de ser juzgado por sus resultados y no por el nombre de su padre.
Al final del tercer mandato en 2020, Togo habrá sido gobernado por los Gnassimbé durante 57 años.

lunes, 27 de abril de 2015

SITUACIÓN EN CENTROÁFRICA ANTE EL FORO NACIONAL DE RECONCILIACIÓN


Análisis

Todo parece listo para empezar el foro nacional de reconciliación tan esperado. Empezará el 4 de mayo próximo para acabar el día12 si no hay cambios. Los obstáculos han sido superados, es decir, todas las tendencias participarán en el diálogo que tiene como objetivo primordial hallar una reconciliación nacional después de más de dos años de enfrentamientos.
Las últimas dificultades vencidas fueron las que se refieren al nombramiento de los dirigentes del foro. La presidenta de transición había hecho público algunos nombres que fueron rechazados de plano por la mayoría de los protagonistas, como fue el caso de Jean Jacques Demafouth.
En definitiva, el foro estará dirigido técnicamente por la ministra de la salud, Marguerritte Samba. Los musulmanes estarán representados por el imam Siliou; las iglesias protestantes por el pastor Guerekoyama y la iglesia católica por el mismísimo arzobispo de Bangui, Dieudonné Nzapalainga. La encargada de preparar el foro, Epaye Beatrice estará en el comité que preside como tercera vicepresidenta. Todos están esperanzados y preparados para el gran encuentro.
No es la primera vez que se hace este tipo de encuentro en Centroáfrica y que, al final, no se respetan las conclusiones y los pactos hechos. En 2003, después del golpe de Estado, el general Bozizé organizó un diálogo nacional que acabó poniendo en marcha un comité de verdad y reconciliación. La presidenta actual Samba Panza era la encargada de llevar a cabo las conclusiones del dicho diálogo. Sin embargo, por falta de voluntad política, nada se hizo. La situación actual del país es parte de los errores y las negligencias del pasado. Como en muchos países de África, los acuerdos no se cumplen y los pactos escritos no tienen tanto valor como en los países con una larga tradición de convenios firmados. Por ello urge que los juristas, combinando tradición y modernidad, encuentren una fórmula que de fuerza real y efectiva a los acuerdos tomados.


Las claves de la crisis centroafricana.

Para entender el problema de Centroáfrica, es importante tener un análisis global de la situación. Lo que parecía en un primer momento un conflicto político se fue transformando en un conflicto religioso mezclando de paso otros elementos nuevos. No se puede entender ahora el conflicto en curso sin tener en cuenta todos ellos. Empecemos esclareciendo estos ingredientes del puzle.

Los seleka:

“Seleka” significa “alianza o matrimonio” en la lengua nacional Sango. En diciembre de 2012, cuatro grupos rebeldes del Nordeste de Centroáfrica se unieron en este movimiento. Todos ellos eran de corte musulmana, religión muy minoritaria en ese país. El objetivo era derrocar al general Bozizé. Consiguieron unir a mercenarios del sur de Chad y del Darfúr (Sudán) acostumbrados a saquear y matar sin compasión. En muy poco tiempo, consiguieron deshacer a los FACA (Fuerzas Armadas Centroafricanas) fieles al presidente Bozizé. En su paso, destruyeron los edificios públicos, quemaron los registros civiles de los ayuntamientos y saquearon las iglesias cristianas. En marzo de 2013, tomaron la capital Bangui y el general Bozizé huyó. El país cayó entre las manos de hordas de gente que pusieron “patas arriba” desde la capital hasta los rincones más remotos de ese inmenso país. Mataron, violaron, saquearon, etc. Durante meses, se hicieron dueños y señores del pueblo.
Con la dimisión forzada del auto-proclamado presidente Djotodia en enero 2014, después de 10 meses de gobierno, los Seleka se retiraron de la capital y optaron por ocupar la parte nordeste del país estableciendo su estado mayor en Bambari. Poco después, se dividieron en grupos. En la actualidad se cuentan tres grupos de Seleka entorno a hombres fuertes. En sus zonas de ocupación, explotan las minas de oro y de diamante sin que el estado tuviera acceso a los beneficios de estas riquezas.

Los anti-balaka:

En realidad la expresión “anti-balaka” viene de una palabra francesa "anti-balle AK" que significa "contra las balas del fusil llamado AK47". Estos son grupos de auto-defensa que surgieron en los años noventa para luchar contra los salteadores de camino en los pequeños pueblos. Eran como milicianos paramilitares. Con la llegada de Seleka, se volvieron a constituirse para defender a sus familias y pueblos contra los matonesde Seleka. Sus armas son sencillas: machete, rifles de caza, flechas y amuletos de la creencia tradicional. Antes de atacar al enemigo, se entregan a unas prácticas tradicionales, beben pócimas mágicas con el fin de protegerse contra el veneno o las balas. De hecho están convencidos de que ninguna bala les puede atravesar. Eso explica en parte su valentía en los combates.
La entrada de los Anti-balaka en el panorama del conflicto centroafricano, cambió los parámetros. Llegaron a echar a los Seleka de muchas localidades y de paso, mataron indiscriminadamente a todos los musulmanes. De repente, lo que era una auto-defensa se convirtió en una limpieza religiosa. Mataron a miles de civiles musulmanes confundiéndolos con los Seleka. Lo que era un conflicto políticofue entonces deslizándose hacia una guerra civil de tinte religioso.
En la actualidad, los Anti-balaka son una confusa nebulosa con múltiples tendencias y jefes. Nunca existieron como movimiento homogéneo por lo que su control es mucho más difícil. Los jefes reconocidos aceptan ir al foro nacional.

FACA:

Estos son los militares del antiguo ejército nacional deshecho por los Seleka. Cuando los Seleka tomaron el poder, prometieron integrarlos de nuevo. Pero estos nunca tuvieron la confianza con el nuevo poder. Los que se manifestaron fueron tratados con desprecio o matados. Sin embargo, entre ellos, hay quienes tienen un buena formación y merecen sus grados mientras que los Seleka se auto-otorgaron grados de general, coronel etc. sin siquiera saber leer y escribir. La mezcla de estos dos ejércitos era prácticamente imposible. No quedaba más opción que esconderse esperando los tiempos mejores.
Cuando los Anti-balaka empezaron a acosar a los Seleka, se incorporaron poco a poco los FACA empezando por los antiguos guarda-espaldas del ex-presidente Bozizé, más odiados por Seleka. Entonces, el conflicto fue cambiando de actitud. Los Anti-balaka dejaron de ser los campesinos provincianos que luchaban con sus machetes para convertirse en verdaderos militares que hacían la vida difícil a los Seleka con armas de guerra.
Con la llegada de Samba Panza al poder como presidente de transición y la retirada de los Seleka, el gobierno intentó reformar al ejército pero nunca pudo poner en marcha su operatividad efectiva. Por una parte porque la ONU decretó un embargo contra las armas en Centroáfrica y por otra porque se teme que rehabilitando enteramente el ejército antiguo, se puede volver a las repetitivas crisis de carácter tribal.
En la actualidad, la Unión Europea ha puesto en marcha una operación de formación de un nuevo ejército nacional que sustituirá al antiguo. Sin embargo, nadie sabe muy bien si se partirá de la base de los FACA existentes o si se va a hacer todo nuevo. ¿Qué harán con los Seleka?

Las milicias cristianas:

Durante un tiempo, se oyó mucho en la prensa internacional hablar de las milicias cristianas. Es importante aclarar que esas milicias no existen. Nunca las iglesias cristianas se han organizado para luchar contra los musulmanes. Al contrario, los dirigentes cristianos y musulmanes se reúnen constantemente en todas las regiones para encontrar juntos los caminos de paz. El arzobispo de Bangui, Nzapalainga, junto con el imam de la gran mezquita de Bangui, Layama, se mueven por todo el país para calmar los ánimos y hacer un llamamiento a la paz.  Sin embargo por desconocimiento, se suele confundir los Anti-balaka con los cristianos. Pues como se ha dicho arriba, los Anti-balaka no luchan en nombre de ninguna iglesia. Empezaron su lucha para proteger sus bienes y pueblos. Además, los Anti-balaka son una mezcla de cristianos de todo tipo (católicos, protestantes, sectas) con los animistas. Sus métodos son más bien animistas que cristianos. No rezan antes de atacar sino que hacen prácticas paganas y contrarias al Evangelio. En resumidas cuentas, las milicias cristianas no existen en Centroáfrica.

Las milicias musulmanas:

Tampoco existen. Nunca los musulmanes en conjunto se han declarado en guerra contra los cristianos. Centroáfrica ha sido siempre un país donde las diversas religiones convivían sin grandes problemas. Es verdad que los musulmanes siempre se han visto como mayoritariamente de origen chadiano, es decir, extranjeros. Pero en la vida cotidiana, no había enfrentamientos que podían hacer pensar en una guerra religiosa. Si hoy se habla de guerra religiosa, es porque los Seleka son mayoritariamente musulmanes. Por asociación, los enemigos de Seleka se convierten en los enemigos de los musulmanes. Por tanto, las milicias musulmanas no existen.

Entonces, ¿Se puede hablar en Centroáfrica de un conflicto religioso?

La repuesta puede ser afirmativa y negativa a la vez.
Respuesta afrimativa porque los Seleka, que son mayoritariamente musulmanes, atacan exclusivamente a los no musulmanes. Y los Anti-balaka que son una mezcla de todos los enemigos de Seleka, atacan exclusivamente a los musulmanes. Entonces, los cristianos y los musulmanes se encuentran en un conflicto que no han creado ellos. Poco a poco, se fueron creando zonas de exclusión donde un musulmán no llega o donde un cristiano no puede pasar. El conflicto que era inicialmente político, se ha ido convirtiendo en un conflicto religioso.
La respuesta es también negativa porque ni los Seleka representan a todos los musulmanes ni los Anti-balaka representan a todos los cristianos. Muchos musulmanes quieren vivir en paz con los cristianos y viceversa. Además, casi todos los líderes religiosos de ambos grupos están llamando a la reconciliación. Si no hubieran trabajado juntos por la paz, no se habría podido evitar un baño de sangre en todo el país. Por otra parte, los Anti-balaka son más bien animistas en la práctica, aunque muchos de sus miembros hayan recibido el bautismo cristiano. Lo que hay en Centroáfrica es un conflicto generado por los Seleka al que responden todos los que no son Seleka. Resulta que los Seleka son mayoritariamente musulmanes y la mayoría de los que no son Seleka, son cristianos. Pero existen muchos musulmanes que, aún siendo simpatizantes de Seleka, no son beligerantes ni anti-cristianos. También existen muchos cristianos que, aún entendiendo la lucha de los Anti-balaka, no son ni guerreros ni anti-musulmanes.
Hay otro elemento que se suele olvidar: es que en muchas familias centroafricanas, hay musulmanes y cristianos. Los chicos musulmanes se casan con las chicas cristianas de manera ordinaria sin que ello cree un conflicto cultural de relieve.

¿Cuáles son las fuerzas internacionales sobre el terreno?

MINUSCA: Son los cascos azules de la ONU. Son militares de distintos países que fueron enviados por el Consejo de Seguridad para sustituir a la fuerza de la Unión Africana (MISCA) e intentar estabilizar el país. Su número tendrá que alcanzar 12.000 hombres pero de momento son menos. Gracias a su presencia, se ha podido restablecer la administración en muchos sitios y mantener un mínimo de seguridad en algunas ciudades y carreteras.

Francia: Desde el 5 de diciembre de 2013, Francia ha desplegado 1.600 militares con el mandato de la ONU.En primer lugar, no habían contado con los Anti-balaka en la capital. Pensaban desarmar a los Seleka y estabilizar la capital en poco tiempo. En el mismo día que llegaron, los Anti-balaka atacaron la capital. Murieron muchas personas.
La presencia de las tropas francesas ayudó a evitar una limpieza de proporciones desconocidas en la capital Bangui.
En la actualidad, su número está mucho más reducido pero siguen operativas junto con la fuerza de la ONU.

EUFOR: Son tropas de la Unión Europea. Esta operación fue decidida para apoyar a Francia en su misión de mantener la paz en Centroáfrica. Llegaron a superar ligeramente 750 personas de más de 16 países entre ellos España.
Su presencia ayudó a tranquilizar a la gente y gracias a su experiencia y su imparcialidad, la capital está mejor asegurada y las instituciones del Estado pueden funcionar.
En la actualidad, EUFOR está acabando su misión. Los países europeos acordaron reducir el contingente a un pequeño número que se encargará de formar al nuevo ejército nacional. España mantendrá allí a 17 efectivos dedicados a este cometido. La nueva misión se llama EUNAM.
La superposición de los conflictos en Centroáfrica.
La crisis actual de la República Centroafricana merece una reflexión mucho más profunda para entender las raíces  que llevaron ese país al borde del abismo. Una mirada superficial no es suficiente para explicar lo que está pasando. Las matanzas indiscriminadas fruto de una violencia ciega no pueden desencadenarse por un hecho casual. La verdad es que en ese país, no hay un conflicto sino una superposición de conflictos, unos relacionados con otros, algunos siendo consecuencia de las malas o nulas soluciones de otros. Los analistas saben bien que toda guerra civil es siempre el resultado de todo un proceso de hundimiento de la sociedad, de un gran fracaso, fruto de una sucesión de conflictos no atendidos ni resueltos. En el caso de Centroáfrica, se puede nombrar al menos seis conflictos. Los veamos uno por uno.

  1. Conflicto político-social.

La República Centroafricana lleva más de cincuenta años de independencia. Durante todo este período, ha tenido seis presidentes, todos dictadores e ineficaces, unos más sanguinarios que otros, todos oportunistas. Los centroafricanos suelen decir que el mandato de cada dictador es de diez años para dejar sitio a otro después de un baño de sangre. El país lleva todo el tiempo de la independencia en turbulencias políticas y sociales. Nunca tuvo momentos de paz y prosperidad. El resultado de todo es la clase política corrupta y oportunista; falta de patriotismo por parte de la elite intelectual; corrupción generalizada, falta de proyecto nacional. Nos encontramos ante un estado fallido dentro de un país más grande que España sin carreteras ni otros tipos de infraestructuras. La sanidad y la educación por los suelos, el hábitat en un estado semejante al de antes de la colonización y un pueblo en permanente frustración. Cada diez años, viene un dictador sin otra visión que llenar sus bolsillos a costa de sus ciudadanos.
Este conflicto politico-social engendró un estado permanente de vacío moral en la cúspide del Estado y una existencia regular de diversas rebeliones en el norte. El estallido de todo ello, dio lugar a lo que estamos viendo: un estado en vías de desaparición. Todos los conflictos posteriores tienen su origen en este hundimiento generalizado del estado. En la base, una sociedad totalmente desarticulada y sin un proyecto vital unitario con proyección de futuro y una desconfianza hacia las instituciones.


  1. Conflicto Bozizé - oposición.

Cuando el general Bozizé tomó el poder con las armas en 2003, el pueblo le acogió como libertador. Fue aclamado en todos los rincones del país por haber echado a un demagogo llamado Patassé. Decía en los primeros meses que venía a arreglar las cosas, organizar las elecciones sin presentarse en ellas. La gente le creó. Pero, al cabo de poco tiempo, cambió de postura. Se convirtió en un déspota. Hizo del Estado un coto privado para él y sus familiares. Organizó las elecciones a su manera, siendo elegido de ante-mano y llenó el parlamento de sus parientes.
Lo peor fue humillar de manera constante a la oposición democrática. Todos los que no decían lo mismo que él fueron completamente ignorados y despreciados. Esto fue su gran error.
No sorprendería que algunos miembros de la oposición democrática se hayan aliado con los rebeldes para derrocarle. Si Bozizé hubiera tenido en cuenta los clamores de los opositores, distendiendo el ambiente, habría gobernado durante mucho tiempo. Este conflicto fue clave en la caída del general en marzo 2013.

  1. Conflicto Seleka contra todos.

La región del norte-este de la República Centroafricana está poblada de dos etnias (Runga y Goula), todas mayoritariamente musulmanas. Es una región olvidada durante mucho tiempo. Durante la mitad del año, la lluvia corta toda comunicación. Las autoridades nacionales van allí de vez en cuando para recaudar impuestos pero el pueblo no ve nada a cambio. Las escuelas y los hospitales no funcionan. La administración es casi inexistente.
La falta de presencia estatal en esta región y la cercanía con la frontera del turbulento Darfúr (Sudán) favorecieron una proliferación de grupos armados, incontrolables. Esos grupos reclutan con facilidad en Darfúr y en el sur de Chad sin que nadie se les impida.
Seleka nació en este ambiente de querer reivindicar sus derechos como región descuidada y como minoría musulmana. En un primer momento, los dirigentes de Seleka no pensaban llegar a Bangui (capital) y tomar el poder. No creían en sus capacidades militares y políticas. Pero, la desagregación del ejército nacional, el estallido del Estado, la corrupción generalizada y el descontento de una parte de la población abrió milagrosamente el camino a esos guerreros musulmanes hacia el poder. No encontraron resistencia. De repente, se dieron cuenta de que podían hacerse con el poder que estaba prácticamente en la calle.
En su avance, fueron improvisando. No tenían un programa político ni ejército capaz de mantener la seguridad ciudadana. Fueron cogiendo en el camino a todo tipo de aventureros y delincuentes que se añadían a los mercenarios del Darfúr y Chad. El resultado fue un caos indescriptible al que sumergieron al país: saquearon los bienes de los cristianos, violaron las mujeres, mataron en toda impunidad. Su llegada al poder fue el colmo de la crisis centroafricana y el inicio de un ciclo de violencia que se arrastra hasta hoy.

  1. El conflicto Anti-balaka contra Seleka.

Viendo las vejaciones a las que los Seleka estaban sometiendo a los pueblos enteros, los jóvenes de algunas regiones reaccionaron. En un primer momento, fue una reacción espontánea de auto-defensa. Armados de fusiles de caza, de lanzas y machetes y con una fuerte creencia en las prácticas mágicas tradicionales, los jóvenes empezaron a luchar contra los Seleka. El pueblo no podía más que aclamar su valentía y su presencia.
Los Anti-balaka no son una milicia cristiana. Son una mezcla de todos los que se oponen a Seleka. Dentro, puedes encontrar a los católicos, protestantes, sectarios, animistas etc. Llamarles una milicia cristiana es un atajo fácil. Aunque la mayoría de ellos sean cristianos, no están enviados por sus sacerdotes o pastores sino que obran  más bien en anarquía total sin control alguno y muchas veces, desoyendo la llamada a la moderación de sus líderes religiosos.
De paso, se fueron añadiendo los antiguos militares de Bozizé excluidos del nuevo poder Seleka. Su presencia en los rangos de la rebelión convirtió a los Anti-balaka en una verdadera guerrilla urbana.

  1. El conflicto cristianos-musulmanes.

En Centroáfrica, los cristianos son más o menos 80% de la población y los musulmanes 12%. Las dos religiones conviven bastante pacíficamente desde décadas. Siempre ha habido pequeñas fricciones relacionadas con el comercio pero nunca se había puesto en duda la convivencia social cristiano-musulmán.
La llegada de los Seleka mayoritariamente musulmanes y sus saqueos a los cristianos fue engendrando un resentimiento de miedo y de rechazo. Muchos vieron en los Seleka un plan de islamización del país. El levantamiento de los Anti-balaka convirtió este resentimiento en odio y separación. Los Anti-balaka empezaron a confundir a todos los musulmanes con Seleka. Se pusieron a matarlos indiscriminadamente. Los Seleka en represalias, se pusieron a matar también a los cristianos. Lo que era un conflicto Anti-balaka-Seleka, se fue transformando poco a poco en un conflicto cristianos-musulmanes. Esto significa que si el conflicto anti-balaka-seleka se acabara, también se acabaría automáticamente este otro de cristianos-musulmanes.

  1. El conflicto centroafricanos-extranjeros.

El conflicto arriba descrito, al convertirse en un conflicto religioso, se ramifica lentamente en otros sectores de la vida centroafricana. Es sabido que Chad (país vecino) ayudó a Seleka a tomar el poder. Además, los chadianos son mayoritariamente musulmanes, es decir muy próximos a de Seleka. De repente, los Anti-balaka ven a los ciudadanos de Chad como cómplices de Seleka. En los enfrentamientos, los Anti-balaka atacan a todo musulmán centroafricano como chadiano. Por otro lado, los militares chadianos que vinieron en el marco de la fuerza africana,manifestaron cierta imparcialidad, poniéndose del lado de los Seleka con los que hablaban la misma lengua (árabe) y compartían la religión. Poco a poco, el conflicto típicamente centroafricano se desplazó, y se amplió a los chadianos y a casi todos los musulmanes de otros países. Finalmente, el gobierno de Chad unilateralmente retiró a sus tropas.


Los desafíos del foro de reconciliación 

El foro de reconciliación nacional que se prepara tendrá que resolver muchos problemas o al menos poner las bases para una convivencia pacífica de los centroafricanos.

1.      El desafío de la convivencia.

El conflicto creó una fisura de gran tamaño entre los cristianos y los musulmanes en todo el país. Muchos miles de musulmanes salieron del país para refugiarse en los países vecinos. Actualmente, hay refugiados centroafricanos en Chad, Camerún y Congo.
La hostilidad entre los Anti-balaka y los Seleka creó una ruptura de tal magnitud que nadie sabe como volver a crear la confianza para lograr una cohabitación pacífica. Solamente en algunos lugares, gracias a los comités de mediación puestos en marcha por la Iglesia católica en los que se encuentran los protestantes y los musulmanes, se consiguió evitar la catástrofe. En Bangassou por ejemplo, ciudad de la región del este, se evitaron los enfrentamientos religiosos gracias al trabajo arduo de los miembros de este tipo de comités iniciados y apoyados por la diócesis de Bangassou cuyo obispo es el español Juan José Aguirre.
Sin embargo, en muchos lugares, todavía hay desconfianza.
El foro nacional tendrá que convencer a todos que la única vía para construir Centroáfrica es aceptar que los musulmanes y los no musulmanes tienen espacio en este mismo país.

2.      El desafío de la justicia.

En un país donde siempre ha habido impunidad tanto para los crímenes políticos como económicos, no es fácil hablar de justicia sin tocar la cuerda sensible. Muchos de los dirigentes centroafricanos están implicados en problemas enormes que llevaron el país a la ruina.
El pueblo clama por la justicia. Pero, ¿cómo compaginar la reconciliación nacional con la justicia? ¿Qué hacer con los dos ex presidentes Bozizé y Djotodia que se encuentran fuera del país pero con cierta influencia en los grupos combatientes de dentro? La justicia será un reto difícil de alcanzar ya que se tendría que empezar por muchos de los integrantes del foro. Muchos seleka y muchos anti-balaka tienen las manos manchadas de sangre.
Todos dicen que no habrá amnistía para los criminales pero en la práctica nadie sabe cómo se alcanzará la justicia si ya se invita a los mismos criminales a decidir sobre el futuro del país.
El gobierno acaba de publicar el decreto que instituye el tribunal especial contra los crímenes. Estará integrado por 14 jueces internacionales y 12 nacionales. Se prevé que este tribunal sea capaz de juzgar a todos los criminales de guerra desde 2003 hasta 2015. El foro nacional tendrá que apoyar la puesta en marcha de este tribunal.

3.      El desafío de los dos ex - presidentes

Dos ex - presidentes se encuentran fuera del país. Por un lado, el general Bozizé que gobernó el país desde 2003 hasta su derrocamiento en marzo de 2013 se encuentra en Uganda. Muchos piensan que está detrás de algunas facciones de los Anti-balaka. Por otro lado, Djotodia que lideró a los Seleka hasta el poder en marzo de 2013 y salió bajo presión de los países vecinos por su impotencia a restablecer la seguridad, se encuentra huido en Benín. Muchos piensan que está apoyando algunas facciones de los Seleka.
El Consejo de Seguridad de la ONU publicó una lista de algunos ex-dirigentes a los que puso sanciones por ser obstáculos a la paz y la estabilidad de Centroáfrica. Entre ellos, se encuentran el general Bozizé y otras figuras.
Hace poco, Bozizé y Djotodia firmaron un acuerdo en Nairobi manifestando su buena voluntad y su mano tendida para alcanzar la paz. Sin embargo, durante las consultas previas al foro nacional, muchos consultados mostraron su rechazo a la presencia de Bozizé y Djotodia en el foro nacional. A día de hoy, nadie sabe si participarán o no. En todo caso, el foro deberá fijar el estatuto a otorgar a esos dos ex - presidentes por su importancia en la estabilidad nacional.

4.      El desafío económico.

Centroáfrica es un país inmensamente rico en sus recursos naturales. Tiene diamante, oro, uranio, madera, hierro y petróleo. Sin embargo esos recursos no están explotados de manera moderna. Las minas de oro y de diamante están siendo explotadas manualmente por los grupos armados y no benefician prácticamente a la economía nacional. En el nordeste, las minas de Bria y Nzako ricas en diamantes están en manos de los Seleka igual que la mina de oro de Ndassima cerca de Bambari. Las minas de diamantes de Carnot y alrededores en el oeste del país se encuentran en manos de los Anti-balaka y sus seguidores.
El uranio de Bakouma fue explorado durante años por la empresa francesa AREVA pero nunca fue realmente explotada. En este momento, está abandonada. El petróleo de Birao y del norte de Centroáfrica nunca fue extraído.
Por lo tanto, a pesar de las riquezas naturales, Centroáfrica es uno de los países pobres con muy pocos ingresos y ampliamente dependiente de las ayudas exteriores. A eso se añade el hecho de que la llegada de Seleka supuso un saqueo generalizado de todas las tiendas y el cierre de las pocas empresas que había en el país. La economía está por los suelos y la recaudación es prácticamente nula.
El foro tendrá que resolver el tema de la economía que no acaba de arrancar. Si un país no es capaz de resolver sus problemas económicos no puede pretender ser independiente. Además, parte de los conflictos que azotan Centroáfrica tienen origen en la pobreza y la falta de futuro de muchos jóvenes.

5.      El desafía de seguridad.

La proliferación de grupos armados sigue paralizando el país. Con los esfuerzos de las tropas internacionales, se consiguió abrir la carretera que conecta el país con Camerún para facilitar las importaciones. También se consiguió recuperar los edificios públicos para la administración central en las grandes ciudades. Pero mucho queda por hacer.
Las carreteras que cruzan el país siguen siendo intransitables por la inseguridad. La carretera que une la capital Bangui con el este (Bangassou) es altamente peligrosa a causa de la presencia de los Anti-balaka por un lado y los Seleka por otro.
Por otro lado, muchas localidades están bajo el mando de los señores de la guerra. La administración central del estado no está todavía instalada correctamente y los pueblos pequeños sufren una inseguridad constante a cada una de las acciones de los guerrilleros. En la propia capital, hay barrios que siguen todavía sufriendo atracos nocturnos y robos de bienes con total impunidad.
En relación a este problema, está el tema de los desplazados. Muchos centroafricanos salieron del país hacia los países vecinos y otros se desplazaron dentro del propio territorio. Unos huyeron de los Seleka mientras que otros huyeron de los Anti-balaka. El foro tendrá que hallar una manera de convencer a unos y otros que pueden regresar a sus casas y asegurar que recuperen sus bienes y no tengan miedo de sus vecinos.
Además, habrá que poner en marcha los servicios de seguridad en todo el territorio para dar seguridad a la población. La policía y la gendarmería tienen que volver a funcionar normalmente.

6.      El desafío de las elecciones.

Uno de los objetivos principales del foro es llegar a un consenso mínimo para organizar las elecciones generales y salir de la transición. Las instituciones de transición que tenían solamente un año para dejar sitio a las autoridades elegidas se vieron obligados a reconocer que aquella misión era imposible. La tarea encomendada de organizar las elecciones es colosal. La inseguridad sigue en muchos lugares; los grupos continúan teniendo armas; el Estado no controla la totalidad del territorio; muchos centroafricanos no están en su lugar de votación por miedo; la mayoría de los funcionarios de la administración territorial se encuentran en la capital por falta de recursos y de seguridad en su lugar de trabajo. ¿Cómo se puede hablar de elecciones en dos o tres meses? ¿Cómo se hará el censo de los votantes si los registros civiles fueron quemados, si muchos extranjeros se han instalado en el país aprovechando el caos, si muchos centroafricanos siguen en los campamentos fuera del país?

7.      El desafío de la unidad del país.

La configuración geográfica de los beligerantes es tal que los Seleka ocupan el nordeste de Centroáfrica mientras que los Anti-balaka ocupan el resto. Durante mucho tiempo, algunas facciones de los Seleka amenazaron con llevar a cabo la partición del país y hacer del nordeste un feudo musulmán. Esta idea está motivada de un lado por el hecho de que los musulmanes se sienten amenazados en los sitios donde no controlan y por otro por las riquezas mineras de la parte ocupada. Allí controlan las minas importantes de diamantes y de oro así como los yacimientos todavía inexplotados de petróleo. Sobre el terreno, de hecho, el país está divido en dos.
Pero, ningún centroafricano serio cree que sea posible romper el país en dos. La comunidad internacional tampoco aceptaría un nuevo país que correría el riesgo de convertirse en refugio de los integristas.
Uno de los objetivos del foro será a llevar a todos a aceptar la idea de una Centroáfrica común e indivisible, donde cada uno encuentre su sitio.

8.      El desafío de un nuevo ejército.
Una de los problemas que tiene el país es el no tener un ejército capaz de garantizar la paz. Durante los regímenes sucesivos se dedicó a instrumentalizar al ejército de tal manera que cada presidente quería ocuparlo con miembros de su etnia. El resultado fue un grupo de hombres y mujeres, poco motivados e incapaces de coordinarse para luchar contra los invasores. Es absolutamente necesario reconstruir el ejército pero los interrogantes son muchos: ¿Se rehabilitará a los FACA de siempre? ¿Se hará un ejército completamente nuevo? Si es así, ¿qué se va a hacer con los antiguos militares formados?
El problema añadido viene de  los grupos armados. Por una parte los Seleka constituyen un ejército. Pero casi todos llevan grados ficticios que se auto-regalaron sin un mínimo de formación. Dentro encuentras a generales y coroneles que no saben leer y escribir. Más aún, nadie sabe a ciencia cierta quiénes son centroafricanos y quiénes no lo son. Todos quieren integrar el ejército nacional. ¿Cómo se hará esta integración? ¿Cómo se conseguirá el desarme de los que no estarán admitidos?
Por otra parte, están los Anti-balaka. Ellos también pretenden entrar a formar parte del ejército. Hace un año, la mayoría eran campesinos sin instrucción y ahora tienen grados militares de oficiales. ¿Qué se hará con estos? El desafío es enorme.

Conclusión:

El conflicto de Centroáfrica tiene dimensiones colosales. No fue una guerra ordinaria sino una destrucción de todo el tejido social que llevó al país al borde del colapso total. Gracias a la Comunidad Internacional, se evitó lo que se vislumbraba como una matanza del siglo. Sin embargo, a pesar de los esfuerzos, el país sigue pareciendo un Estado fallido. Las necesidades son enormes y los desafíos gigantescos.
Todo el mundo tiene esperanzas en el foro nacional. Sin embargo, sabemos por experiencia del pasado que los foros no resuelven los problemas. Hace falta voluntad política y cambio de mentalidad de las élites del país. Nadie sensato cree realmente que la situación cambiará un día después del encuentro. Será el inicio de un largo camino para llegar a desarmar los grupos armados, tranquilizar a los habitantes, poner nuevamente en marcha todas las instituciones, luchar contra la corrupción, asegurar los ingresos en las arcas públicas, crear confianza y poner en marcha el país, etc.
Deseamos un buen futuro a ese país que no merece el estado en el que se encuentra ahora.


Gaetan Kabasha

El drama de la inmigración continua.

Después del naufragio de más de 800 personas en el Mediterráneo la semana pasada y las reuniones de los dirigentes de la Unión Europea para tomar medidas, el secretario general de la ONU advirtió que la inmigración no se puede atajar con soluciones militares. El problema es que tiene razón. Un problema humanitario no se soluciona con medios militares.
Es muy fácil desplegar barcos y aviones a las costas de los Libia y controlar todas las embarcaciones de miseria durante un tiempo. Esto solamente acabaría temporalmente con los naufragios pero no acabaría con la inmigración.
Estamos en un mundo globalizado donde la información circula. Los logros económicos y sociales de Europa se difunden por diversos medios en el mundo y los jóvenes de los países pobres sueñan cada vez más en emprender aventuras a costa de sus vidas para ir a disfrutar de esos logros. Es lo que pasa cuando en un mundo globalizado una parte de la humanidad se desarrolla dejando la otra en la miseria. Suelo comparar esto con un cuerpo con una pequeña herida. Nadie puede dormir tranquilamente teniendo una herida en el pie aunque sea pequeña. O se cura todo el cuerpo o la persona pasa la noche sin dormir. Es lo mismo que la humanidad. Si no se pone en marcha estrategias globales para fomentar el desarrollo y la estabilidad de los países pobres, la inmigración será cada vez más difícil de controlar. No hay fronteras que valgan ante el ser humano.
De manera inmediata, es importante estudiar el tema de manera conjunta entre la Unión Europea, la Unión Africana, la liga árabe bajo la supervisión de la ONU. Si los países de origen no se implican, no hay solución que valga. Además, hay que implicarse seriamente en la estabilización de los países como Libia, Siria, Irak etc. Cabe recordar que la desestabilización de estos países tiene que ver con el derrocamiento de sus instituciones por parte de Occidente. ¿Alguien se acuerda de lo que nos decían al atacar Irak y posteriormente Libia? ¿Dónde está la prosperidad que prometieron a los habitantes de esos países?

lunes, 20 de abril de 2015

A la víspera del foro nacional en Centroáfrica


Todo parece listo para empezar el foro nacional de reconciliación tan esperado. Empezará el 27 de abril para acabar el 2 de mayo. Todos los obstáculos han sido superados, es decir, todas las tendencias participarán en el diálogo que tiene como objetivo primordial reconciliar a las tendencias después de más de dos años de enfrentamientos.
Las últimas dificultades superadas fueron las que se refieren al nombramiento de los dirigentes del foro. La presidenta había hacho publico algunos nombres que fueron rechazados de plano por la mayoría de los protagonistas. Finalmente, se echó por atrás, retiró el nombre de Jean Jacques Demafouth  y nombró a otros más consensuados.
En definitiva, el foro estará dirigido técnicamente por la ministra de la salud, Marguerite Samba. Los musulmanes estarán representados por el imam Siliou; las iglesias protestantes por el pastor Guerekoyama y la iglesia católica por el mismísimo arzobispo de Bangui, Nzapalainga. La encargada de preparar el foro, Epaye Beatrice estará en el comité que dirige como tercera vice presidenta. Todos están contentos y preparados para el gran encuentro.
No es por primera vez que se hace estos tipos de encuentros en Centroáfrica y que, al final, no se respetan las conclusiones y los pactos hechos. En 2003, después del golpe de Estado del general Bozizé, se hizo lo que se llamó el diálogo nacional que acabó poniendo en marcha un comité de verdad y reconciliación. La presidenta actual Samba Panza era la encargada de llevar a cabo las conclusiones del diálogo. Sin embargo, por falta de voluntad política, nada se hizo. La situación actual del país es parte de los errores y las negligencias del pasado. Como en muchos países de África, los acuerdos no se cumplen y los pactos escritos no tienen tanto valor como en los países con una larga tradición de convenios firmados.

Esperemos que esta vez los representantes de los diferentes protagonistas se pongan serios y salgan el país del atolladero en el que está metido.

Inmigración: ¿de dónde viene tanta agitación?

Siguiendo las intervenciones de los dirigentes europeos a raíz del hundimiento del pesquero con más de 700 inmigrantes en el Mediterráneo, uno pensaría que el drama de la inmigración empezó ayer. Muchos organismos y observadores llevan tiempo clamando por una respuesta a un problema que cada vez es más grave y más dramático. El papa Francisco en julio de 2013 gritó al mundo para que todos lo entendieran diciendo que era una vergüenza mundial. Llevamos tiempo asistiendo a un drama a las puertas de Europa. Cuando no se hunden en el Mediterráneo, sufren de otras desgracias en los países africanos que colindan con Europa. Las escenas de Ceuta y Melilla son cotidianas. En Marruecos, son miles los que esperan la oportunidad para intentar cruzar. Más allá, son miles los que están en camino cruzando el desierto de Niger, de Mali, de Mauritania, de Algeria etc con un único sueño: llegar a Europa algún día.
Desde Europa, se habla de 700 fallecidos en un naufragio. Pero no olvidemos que se trata de 700 familias hundidas por allí y que nunca sabrán si los suyos están dentro o no. Muchos de los que emprenden el viaje no son las pobres y débiles. Son jóvenes con vitalidad con mucha ilusión que quieren mejorar su futuro intentando lo imposible. Dejan atrás a numerosas familias, padres, mujeres, hijos con la promesa de llegar lejos y enviarles dinero. Son aquellos que tienen capacidad humana, psicológica e incluso intelectual para luchar contra las contrariedades en estos tipos de aventuras.
En África, las noticias de los dramas del Mediterráneo no llegan o llegan ya diluidas. Nadie realmente toma en serio lo que está pasando. En cambio, las embajadas europeas son duras con los que realmente quieren ir a Europa legalmente y con motivos. Sin embargo, no son capaces de controlar a los que van ilegalmente. Es más, el hecho de endurecer demasiado los requisitos para la obtención del visado favorece la inmigración arriesgada.
Ahora los países europeos se despiertan de un sueño profundo y dicen que van a actuar. Pero, ¿qué van a hacer? ¿Ir a las costas africanas a recoger a los que allí están esperando la oportunidad para venir? ¿Ir a la alta mar a esperar que lleguen los pesqueros de los mafiosos sin vergüenza y hacer el relevo? ¿Construirán una valla en el mar para hacer impermeable Europa?
El mundo tiene que darse cuenta de que cuando hay una herida en el cuerpo, uno no puede dormir tranquilamente antes de curarla. O se favorece el crecimiento africano de manera global o la infección se generalizará.

domingo, 19 de abril de 2015

¿Qué hacer con la inmigración?

Con los 400 desaparecidos esta semana, ya van 900 muertos conocidos en el Mediterráneo por lo que va del año. ¿Cuántas embarcaciones clandestinas habrían desaparecido sin dejar rastro? ¿Cuántas vidas perdidas en este mar que se ha convertido ya en un inmenso cementerio a cielo abierto? Pero sobre todo, ¿qué se puede hacer?
La desestabilización de los países del Magreb con Libia en la cabeza sigue produciendo consecuencias incalculables. El hecho de no tener autoridades estables y control de fronteras hace que muchos ya sea por aventura, ya sea por engaño de las mafias se lanzan al mar sin saber si llegarán o no. Seguramente guardan la esperanza de llegar y conseguir el deseo de sus sueños.
En África se vende la idea de una Europa rica, próspera, tranquila y llena de oportunidades. Nadie dice a los africanos que también hay pobres, indigentes, mendigos en Europa. Nadie dice a esas chicas que se aventuran que pueden acabar en la prostitución. Se vende lo bueno y se omite lo malo.
En muchos países de África, los jóvenes sueñan con llegar a Europa una vez y morir. No importa el riesgo. Las aventuras forman parte del sueño. Son ya miles los que están en camino en distintos países dirigiéndose al norte con la idea de alcanzar el mar y buscar una manera de cruzar. A veces salen de sus tierras ya custodiados por mafias; pero también los hay que se aventuran ellos mismos en busca de vida mejor sin más. Luego una vez que han salido de sus países, no hay vuelta atrás. Conseguir el objetivo o morir intentándolo es el proyecto.
La inmigración no se puede acabar con más leyes en Europa. La sangría se tiene que parar desde los países de origen. Seguramente la mejor respuesta sería desarrollar los países africanos. Pero eso no se hace con un bastón mágico. Tampoco se hace entregando mucho dinero a los gobiernos. El desarrollo es un proceso complejo y lento. Por tanto es una solución a largo plazo. Pero si los países africanos quieren reducir la inmigración, lo pueden hacer. Hace falta sencillamente voluntad de hacerlo.
De momento, no he vista ninguna reunión de la Unión Africana que lleve en su agenda el tema de los africanos que mueren en el Mediterráneo. La inmigración preocupa a Europa. Pero ¿preocupa también a África?

sábado, 18 de abril de 2015

Riesgo de colapso en Burundi

Burundi es un país marcado por una historia de enfrentamientos étnicos entre Hutus y Tutsis. Estas dos grupos que también se encuentran en Rwanda en las mismas proporciones y con una historia parecida aunque con matices viven siempre en un equilibrio muy frágil. En cualquier momento, el estallido de violencia puede llegar a una catástrofe.
Uno de los legados importantes del sabio Nelson Mandela fue dibujar un marco de convivencia entre los grupos repartiendo los puestos con proporciones consensuadas. Todo se encuentra en los acuerdos de paz de Arusha que pusieron fin a muchos años de enfrentamientos. En estos acuerdos, se estipula que el presidente debe ser elegido en unas elecciones generales y solamente puede dirigir durante dos mandatos.
Desde que se puso en marcha este marco de convivencia, las violencias étnicas se calmaron. Muchos refugiados hutus que se encontraban fuera del país pudieron volver y muchos desplazados tutsis también volvieron a sus tierras. Se inició un programa de rehabilitación de la memoria en el que se indemnizó a algunas familias que perdieron a los suyos durante las matanzas repetitivas. También los que perdieron su tierra pudieron recuperarla pasando por un comité puesto en marcha por el gobierno.
Ahora, el miedo vuelve a reinar. El presidente Nkurunziza, elegido primero por los diputados de la nación para cinco años y luego por el sufragio universal para otros cinco años, acaba diez años en el poder. Una parte de la población cree que ya cumplió con lo estipulado en los acuerdos de Arusha y tiene que dejar el paso a los demás; otra parte cree que puede todavía presentarse al tercer mandato.
El problema de Burundi es que cualquier estallido de violencia puede despertar los viejos demonios. Nadie quiere realmente una nueva guerra ni nuevos enfrentamientos. El país necesita estabilidad para crecer. La solución se encuentra entre las manos de los políticos. Cualquier error puede ser fatal.
Ya se habla de 7.000 burundeses refugiados en el país vecino Rwanda. Cabe recordar que todo lo que pasa en Burundi tiene repercusión directa o indirectamente en Rwanda ya que las realidades socio-culturales son las mismas.
Esperemos que las aguas se queden en sus cauces y que reine el sentido común.

martes, 14 de abril de 2015

¿Dónde están 200 niñas de Nigeria?

Hace un año el mundo entero estuvo consternado al enterrarse del secuestro de 200 niñas de Nigeria por Boko Haram. La primera dama estadounidense y más personas en el mundo se movilizaron en las redes sociales para localizar y devolver las niñas a sus padres. Todos vimos las etiquetas de "bring back our girls"y pensábamos que las cosas iban a entrar en orden y que las niñas iban a volver a casa. Lo que no sabíamos es que los integristas funcionan con otra lógica y probablemente se sienten ensalzados cuando ven este tipo de publicidad.
Algunos países ofrecieron su ayuda a Nigeria para localizar las chicas; USA habría desplegado drones aunque el gobierno de Goodluck Jonathan nunca se mostró demasiado entusiasta para dejar a otros venir en su ayuda. El hecho es que un año después, las niñas siguen desaparecidas y nadie sabe a ciencia cierta si siguen vivas o si están siquiera en Nigeria. Las cuestiones son numerosas: ¿siguen vivas? ¿siguen en Nigeria? ¿siguen sanas? ¿Se han visto obligadas a casarse con los guerreros de Boko Haram? ¿se han convertido en kamikazes en los múltiples atentados que sufre Nigeria en el norte? ¿Fueron vendidas a otros grupos fuera de Nigeria?
Nadie a día de hoy puede dar una respuesta a esas preguntas. La ONU cree que la mayoría fallecieron enviadas a los campos de batalla o estallaron con los cinturones de explosivos. Otros observadores creen que ya no están en Nigeria sino que habrían sido vendidas como esclavas a otros grupos del Sahel. Incluso, hay quienes creen que habrían tomado el camino del golfo.
En fin, es un drama más que se añade a tantos dramas que sufren muchos lugares de este mundo. Nigeria lleva años sufriendo la lacra del terrorismo de Boko Haram igual que otros países como Somalia, Mali, Siria, Irak y tantos otros sitios donde la razón ha dejado de funcionar en la lógica del bien. Parece que el mal sigue acampando entre nosotros. Un pesimista puede incluso llegar a pensar que el bien retrocede.
Ánimo a las familias de las niñas nigerianas.

lunes, 13 de abril de 2015

Desconfianza en el foro de reconciliación en Centroáfrica.

Hace poco Beatrice Epaye, antigua ministra de comercio, miembro del Consejo nacional de Transición y personalidad de la sociedad civil dirigía los preparativos para el gran foro nacional de reconciliación. Gracias a su tenacidad y su interés por el final útil de este foro, consiguió enviar emisarios a todos las grandes ciudades del país. A pesar de la inseguridad que sigue en muchos sitios, los emisarios llegaron a todos los sitios y pudieron tomar contacto con el pueblo. El objetivo era hablar con la gente, escuchar su sentir y sus quejas; toma en consideración sus deseos antes de iniciar el foro nacional. Así se hizo y la gente habló claramente. Entre otras cosas, la gente expresó su deseo de ver la justicia castigar a los criminales de todos los bandos; ver a sus autoridades llegar al pueblo; ver la seguridad en las carreteras y sobre todo que Bangui no sea un bunker para los dirigentes. Epaye hizo su informe y lo entregó a las autoridades competentes.
Todo el mundo esperaba que sea designada para llevar a término el trabajo dirigiendo el foro ya que ella conoce los detalles de los preparativos. Desgraciadamente no fue así. La presidente de transición acaba de quitarle la cartera y entregarla al consejero a la presidencia Jean Jacque Demafout, un personaje muy controvertido, varias veces rebeldes y también varias veces candidato a la presidencia sin ganar. En teoría, la presidente está en la legalidad ya que le corresponde nombrar al responsable del foro. Sin embargo, hay quienes piensan que el entorno presidencial puede orientar el encuentro a su manera y no tomar en cuenta de todas las recomendaciones.
Demos una felicitación a Epaye por su trabajo y deseemos al gobierno de transición que sea sabio y que esta vez el foro sea un encuentro de verdadera reconciliación y de verdadera mea culpa de todos los actores de la crisis centroafricana.

Muere André Ba Obame de Gabón

Gabon es un país que lleva muchos años de estabilidad política. Los primeros años de su independencia fueron marcados por los golpes de Estado pero desde 1967, cuando tomó el poder Bernard Bongo quien se hará llamar después de su conversión al Islam El hadj Omar Bongo, el país ha conocido una tranquilidad política y social.
André Ba Obame estudió en Paris y se doctoró en ciencias políticas. Con sus 27 años, volvió a Gabón para formar parte de la élite del gobierno de Omar Bongo. Se hizo amigo de Ali Bongo, el hijo del entonces presidente. Nunca se alejó de la política de primer línea.
En 2009, Omar Bongo muere en Barcelona y deja el poder vacante. A partir de este momento, los antiguos amigos se convierten en rivales para ocupar el puesto. André Ba Obame creía que era el sucesor legítimo y se presentó a las elecciones. Pero, frente a él, tenía a su amigo, Ali Bongo, hijo del difunto presidente. Los amigos devienen enemigos.
Al final, Ali Bongo es proclamado presidente de la República de Gabón y Obame ocupa la tercera posición. Obame rechaza los resultados y se auto-proclama presidente. Intenta formar un gobierno paralelo que nunca funcionó. Sus partidarios intentan desestabilizar el gobierno de Ali Bongo pero no lo consiguen. Entre tanto, empieza a tener los problemas de salud. Llega incluso a acusar a sus enemigos de haberle echado un mal de ojo con la práctica voudou muy popular en la zona.
André Ba Obame muere sin ver su sueño de ser presidente de Gabon. El anuncio de su fallecimiento desató disturbios de sus partidarios en la capital Libreville.

domingo, 12 de abril de 2015

Las guerras africanas (part 4)

La LRA y el fenómeno Joseph Kony

En este mundo pasan cosas dramáticas que dejan a uno perplejo o impotente ante la magnitud de la catástrofe. Cuando esas cosas pasan en occidente o en algún país donde se encuentran los intereses de las potencias de este mundo, la prensa hace eco de ellas y al final se toma medidas para acatar el problema. Desgraciadamente, cuando esas cosas pasan en algún rincón sin interés, nadie dice nada. ¿Quién conoce de verdad a Joseph Kony? ¿Quién conoce los detalles de sus atrocidades? ¿Quién sabe que existe un grupo que secuestra a los niños, viola a las mujeres, forma un ejército de adolescentes y desplaza pueblos enteros durante años? Kony pasará en la historia como uno de los rebeldes más sanguinarios que el mundo haya producido.

Historia.

Uganda es un país que conoció muchas guerras sucesivas y muchos dirigentes sanguinarios. Desde su independencia en 1961 de manos de Gran Bretaña, el país se convirtió en un escenario de golpes de Estados y guerras de las distintas tribus para hacerse con el poder.
De 1961 a 1966, dirigió el país Kiwanuka quien fue derrocado en golpe de Estado sangriento por Milton Obote. Éste empezó una limpieza étnica durante sus años de gobierno hasta que fuera expulsado por el célebre Idi Amin Dada en 1971. Este señor se hizo famoso no solamente por su corpulencia sino también por su brutalidad. Muchos se acordarán de la película "Rescate en Entebbe" y "El último rey de Escocia" que pusieron de manifiesto la megalomanía de este dictador sanguinario y poco escrupuloso.
Se cuenta que Idi Amín arrojaba a sus víctimas humanas en un lago de los cocodrilos y disfrutaba mirándoles devorados vivos. Durante su mandato, se ensañó con los habitantes de las tribus del Norte, particularmente Acholi y Langi. Al final de su reinado, la Comunidad Internacional llegó a contabilizar aproximativamente 100.000 asesinatos pero hay quienes piensan que la cifra es demasiado pequeña.
En 1978, el ejército de Tanzania apoyado por la Inglaterra entra en Kampala y derroca a Idi Amin. Toma el poder Yusuf Lule quien luego fue derrocado por Binaissa. Los dos presidentes no tardan en el poder ya que Milton Obote que había huido de Idi Amín vuelve del exilio y toma nuevamente el poder en 1980.
Obote se enfrenta a múltiples rebeliones. Hostiga a los habitantes del sur de Uganda y llega a echar a los refugiados ruandeses considerándolos cómplices de sus opositores. Fue en aquella época que muchos refugiados ruandeses entre ellos Fred Rwigema y Paul Kagame que no sabían adónde ir entraron en la rebelión de Museveni.
En 1985, el general Tito Okello echa a Obote quien huye a Zambia y toma el poder en Kampala. Pero su gobierno no dura porque en 1986, Museveni, apoyado por todo un ejército de refugiados ruandeses y los países vecinos toma el poder. A partir de este momento, los militares afines a Tito Okello huyen hacia el norte en la frontera con Sudán y empiezan guerrillas contra el nuevo mandatario. De allí nacerá la LRA.
Entre 1961 y 1986, es decir en menos de 25 años, Uganda fue dirigido por más de ocho presidentes, todos llegados al poder en medio de la violencia. El país que era muy próspero en la época colonial quedó destruido y las infraestructuras descuidadas. Desde 1986 hasta hoy, Uganda ha tenido estabilidad y cierto auge económico con el presidente Museveni.

¿De dónde surge Joseph Kony?

Joseph Kony nace en el norte de Uganda 1961 exactamente en la época de la independencia de su país. Es de tribu acholi. Durante los años siguientes a la independencia, esta parte del país ha sido varias veces abandonada por los gobiernos centrales cuando no perseguida duramente. Durante el mandato de Idi Amín, los acholi fueron duramente hostigados y perdieron a muchos de sus eminentes dirigentes. Se puede decir que Kony creció en un ambiente de violencia permanente.
El padre de Joseph Kony era catequista católico mientras que su madre era de confesión anglicana. Siguiendo los pasos de su padre, Kony se inicia en la Iglesia católica y se hace monaguillo hasta 1976.
En 1995, Joseph Kony entra en el movimiento armado de Alice Lakwena llamado "Movimiento del Espíritu Santo". Pero ¿quién es Alice Lakwena?
El movimiento de Alice Lakwena empieza en los años 1980. Pero realmente, esta mujer se hace conocer en 1986 cuando Museveni toma el poder en Kampala y ella se ve obligada a huir en el norte de Uganda para oponerse al nuevo mandatario. Constituye un ejército místico  y pretende luchar con procedimientos mágicos.
Lakwena afirmaba estar en contacto con los espíritus potentes entre ellos Nyaker de Acholi, Wrong americano, Ching po coreano, Franco de Zaïre etc. Ella se consideraba un nexo espiritual y mezclaba el cristianismo con el esoterismo. Pensaba comunicar con el mundo del más allá y predicaba la pureza moral. Su objetivo era derrocar al gobierno central e instaurar un reino místico y escatológico basado sobre los principios cristianos.
Durante sus batallas contra el ejército nacional, ungía a sus soldados y les prometía la invulnerabilidad contra las balas. Se cuenta que tenía poderes extraordinarios para transformar a sus militares en árboles o hormigas desviando así la atención del ejército enemigo. Sus enemigos huían más por el miedo a los poderes mágicos que por la potencia militar.
Sin embargo, a pesar de sus pretensiones mágicas, fue derrotada y muchos de sus soldados murieron en los campos de batallas perforados por las balas. Sus unciones no habían conseguido gran cosa. Huyó a Kenya y dejó su movimiento entre las manos de Joseph Kony.

El surgimiento de la LRA.

Joseph Kony toma el mando de la rebelión contra Museveni después de Alice Lakwena, transforma el Movimiento del Espíritu Santo en una nueva agrupación utilizando los mismos métodos.  Así nace la LRA (Lord Resistance Army) con la pretensión de luchar contra el gobierno hasta tomar el poder en Kampala.
Kony cree que está protegido por la providencia. Lleva una cruz en su pecho como signo de protección y de alianza con el más allá y obliga a sus soldados a llevar la  misma cruz. Empieza su jornada con una sesión de oraciones y prácticas espirituales. Unge a sus soldados con aceites y los convence que las balas no pueden nada contra ellos. Durante la iniciación de sus guerreros los habla con voz fuerte y les adoctrina en esa creencia de que luchan para restaurar el reino de Dios sobre la tierra, un reino que se regirá por los diez mandamientos bíblicos. Cree en la poligamia y se dice que habría tenido más de 40 mujeres y una multitud de hijos, todos miembros de su ejército.
Kony empezó luchando desde el norte de Uganda con objetivos políticos. Pensaba derrocar al gobierno de Museveni y gobernar el país. En aquella época tenía apoyos de Sudán del norte y más tarde de Mobutu de Zaïre. Mientras que Museveni sostenía el Sudán del sur cristiano en su lucha contra el norte musulmán, el norte musulmán sostenía a Kony que se declara fundamentalista cristiano. Aquí se ve cómo los intereses estratégicos estaban más allá de las creencias religiosas.
Kony se ilustró en el secuestro de niños en el norte de Uganda a los que llevaba a la selva y los transformaba en soldados después de una limpieza mental. Sus métodos consistían en secuestrar y adoctrinar a los niños de tal manera que no quede nada de sentimiento humano en sus corazones. Se cuenta que en varias ocasiones enviaba a esos niños ya adoctrinados a matar a sus padres para mostrar fidelidad y valentía antes de ser considerados como guerreros oficiales.
En los lugares donde ha pasado el ejército de Kony se cuentan atrocidades sin nombre: mutilaciones horribles, quema de personas vivas, violaciones de mujeres delante de sus hijos, estrellar los niños contra la roca etc. Los que intentan escapar de su ejército reciben un castigo ejemplar hecho de tortura atroz hasta la muerte. La LRA es un ejército de gente sin rastro de compasión, desprovista de todo tipo de sentimiento humano. Uno de sus características es matar sin pensar.

La internacionalización de la LRA

En los años 1994, hubo un cambio estratégico en la región de los Grandes Lagos. Murieron los presidentes Habyarimana de Rwanda (1994), Mobutu de Zaïre (1997) y el célebre rebelde Savimbi de Angola (2002). El gobierno de Sudán del norte empezó a negociar con los rebeldes del Sudán del sur para acabar con la guerra que llevaba décadas y de la que Kony aprovechaba. De repente, Kony se encontró aislado sin apoyos suficientes para seguir enfrentándose al ejército nacional de Uganda. Su derrota militar no se hizo esperar.
En los años 2006, Joseph Kony, hostigado por el ejército de Museveni y aprovechando la porosidad de las fronteras de los países vecinos, huye de Uganda; cruza la frontera con sus secuaces y se instala en la selva de Garamba en la República Democrática del Congo dejando atrás a más de 2.000.000 de desplazados. Allí, sigue con sus tropelías pero ya no para conquistar el poder sino para sobrevivir. Empieza a enviar sus tropas a los poblados para saquear víveres. Cuando sus guerreros llegan a un pueblo, cogen los víveres, capturan a los hombres para transportar el botín hacia la selva, queman vivos a los que no pueden andar, violan las mujeres. De paso, secuestran a todos los adolescentes, los varones para ser futuros soldados y las chicas para servir de esclavas sexuales.
Miles de congoleños cruzan la frontera de Zapay y llegan a Zemio en la República Centroafricana huyendo de las barbaridades de la LRA. Allí se encuentran hasta hoy en los campamentos de refugiados atendidos por la Comunidad Internacional. Unos 4.000 refugiados siguen instalados en los campos esperando los mejores días que no llegan.
A pesar del decreto del presidente Museveni dando la gracia presidencial a todos los rebeldes en 2006, y a pesar de la voluntad del gobierno de Uganda de llegar a un acuerdo, Kony prefiere seguir su vida en la selva. En 2008, cruza la frontera de la República Centroafricana y ataca la ciudad de Obo. Su llegada a Centroáfrica produce un movimiento masivo de desplazamiento de la población. Prácticamente todos los pequeños pueblos desaparecen y la gente tiene miedo a ir a sus huertos para sembrar. La hambruna se instala en toda la zona del Este de la República centroafricana
Desde entonces, la LRA no ha dejado de maltratar al pueblo tanto congoleño como centroafricano. Las violaciones de los derechos humanos son incontables. Los que consiguen escapar de los campamentos de Kony cuentan un sinfín de barbaridades. Cuando la LRA ataca un pueblo, muchas personas están atrapadas y obligadas a llevar cargas pesadas sobre sus cabezas y hacer marchas forzadas durante días en medio de la selva. Luego, los que tienen suerte están liberados pero todos los adolescentes y niños se quedan para convertirse en soldados o esclavas sexuales de los militares. Los niños que nacen en la selva se convierten automáticamente en rebeldes y no conocen otra cosa que la violencia y la vida salvaje.

En la actualidad, el ejército de Uganda se encuentra en el Este de la República centroafricana intentando acabar con la LRA y capturar a Joseph Kony. Lleva más de seis años en Obo y los alrededores pero no se atreve a entrar en la selva. Dice que es la tarea del ejército de Centroáfrica pero éste no existe. También unos cien militares estadounidenses se encuentran en la ciudad de Obo dando apoyo al ejército de Uganda en el mismo sentido. La Unión africana tiene como prioridad acabar con este hombre pero de momento no lo ha conseguido. El Tribunal Internacional de la Haya lanzó una orden de busca y captura contra Joseph Kony pero no tiene medios para llevar a cabo su decisión. Entre tanto, los pueblos del este de Centroáfrica y del nordeste de la RDC  viven bajo amenaza constante de esta gentuza. Se sabe que Kony vive en un punto entre Sudán del Norte, el del Sur y la República Centroafricana, en la localidad de Kafia Kingi pero nadie se atreve a adentrar allí para buscarlo.

viernes, 10 de abril de 2015

Los desafíos del foro de reconciliación de Bangui

Del 27 de abril al 2 de mayo, tendrá lugar en Bangui el foro de reconciliación nacional. Después de dos años de fuerte crisis qui sacudió todas las instituciones del país, los diferentes protagonistas están de acuerdo para enterrar la hacha de la guerra, volver a la convivencia y reponer en marcha un Estado que convenga a todos.
Antes de iniciar este foro, los diferentes funcionarios fueron enviados por el gobierno de transición a todas las ciudades del interior del país, escoltados por los cascos azules para escuchar el sentir del pueblo. Pudieron darse cuenta del deterioro de la situación y de la destrucción de los mecanismos del Estado. La llegada de Seleka en el poder en marzo de 2013 supuso un antes y un después en un país que ya tenía dificultades económicas e inestabilidad política. Se destruyó todos los signos del Estado empezando por los registros civiles en los ayuntamientos. Luego después, el surgimiento de los anti-balaka trajo consigo un desencadenamiento de violencia sin precedentes. En estos momentos, todavía el país sigue dividido en diferentes facciones antagónicas.
Paralelamente a los preparativos del foro, otros protagonistas estuvieron haciendo negociaciones en Nairobi (Kenya) inicialmente bajo iniciativa del mediador de la crisis, el presidente de Congo, Sassou Nguesso. Se trataba de reconciliar a los dos ex-presidentes, Bozizé y Djotodia. Los dos pudieron verse y hablarse. Por lo visto, dan luz verde a que sus partidarios en el interior del país acudan al foro de reconciliación sin trabas.
No será un trabajo fácil. Dentro del foro, se encontrarán facciones todavía enemigas como los seleka y los anti-balaka. Pero también, estarán allí los partidos políticos no beligerantes que se llaman democráticos. Junto a ellos, estará el gobierno de transición intentando modelar. Al lado de estos protagonistas políticos, se ha invitado a las asociaciones civiles (ONGs, plataformas por la paz, las diferentes confesiones religiosas etc).
Se supone que al final del foro, el pueblo podrá respirar la paz. El objetivo principal es conseguir que los beligerantes depongan las armas y acepten ser desmovilizados pacíficamente. La etapa siguiente será la organización de las elecciones libres para tener a un presidente y a los diputados elegidos democráticamente.
Toda la comunidad internacional está mirando con lupa los próximos días y podrá comprobar la madurez del pueblo centroafricano.

jueves, 9 de abril de 2015

La fosa común en Kinshasa

El problema de la fosa que contiene 421 cuerpos cerca de Kinshasa sigue creando polémica. Para el gobierno actual, se trata de cadáveres que llevan tiempo en el tanatorio del hospital general de Kinshasa. Las autoridades del hospital, al comprobar que nadie los reclamaba, concluyó que eran cadáveres de los indigentes sin familiares y decidió enterrarlos en una fosa común. Sin embargo, las asociaciones de los derechos humanos tanto interiores como exteriores así que la comunidad internacional insisten en la obligación de exhumar los cuerpos y practicar la autopsia.
Los partidos de la oposición hablar de una matanza hecha por los cuerpos de seguridad durante la manifestación de enero contra la revisión de la constitución.
Muchas son las cuestiones que habría que aclarar según ellos:
- si alguien muere en un hospital siendo indigente, ¿pierde la dignidad y tiene que ser enterrado en una fosa común? ¿El ayuntamiento de Kinshasa no puede comprarle un ataúd y enterrarlo en un cementerio público?
- ¿Qué hacían más de cuatrocientos cadáveres juntos en el tanatorio del hospital?
- ¿Las autoridades del hospital no disponen de un registro de enfermos que fallecieron durante estos días para poder identificar a estos cuerpos?

En fin, las voces se elevan para exigir una investigación para establecer de quienes pertenecen estos cuerpos contrastando los datos y sobre todo comprobar que no murieron por impacto de barra o de golpes.
Entre tanto, las mismas organizaciones de derechos humanos siguen exigiendo la liberación de los activistas pro-democracia detenidos cuando realizaban una conferencia de prensa junto a sus homólogos de Senegal y Burkinafaso. El gobierno les acusa de atentado contra las instituciones del Estado.

martes, 7 de abril de 2015

Mención en la prensa.

http://www.elmundo.es/elmundo/2013/09/06/paisvasco/1378454921.html

http://vd.pcn.net/es/index.php?option=com_content&view=article&id=1381:un-profeta-en-bangassou&catid=4:testimonios&Itemid=18

http://www.latribunadeciudadreal.es/noticia/Z4E38E5DA-DEED-BBEA-52AE29C3906789B5/20120814/seis/dias/misionerosque/contagian

http://www.diariocordoba.com/noticias/opinion/lloviendo-piedras_791703.html

http://africando.org/ong/prensa-para-pensar/una-mirada-a-la-republica-centroafricana/#more-11186

Rwanda se sumergió en el genocidio

La mañana del 7 de abril de 1994, nadie de los que habitábamos entonces Rwanda sabía que pensar ni que comentar. Al oír por la radio la muerte de dos presidentes Habyarimana de Rwanda y Ntaryamira de Burundi, pensábamos que el cielo se había derrumbado sobre el país. Después de cuatro años de guerra, el clima psicológico era de máxima tensión. El volcán estaba a punto de estallar. Y estalló. La caja de pandora se rompió y parió un indescriptible genocidio y una larga y triste historia de un pueblo que se consideraba antes muy introvertido.
A partir de ese día, lo que ocurrió no se puede describir en palabras porque las palabras son siempre más cortas que la realidad y nunca dan justicia a la verdad. Solamente se puede callar y meditar. Meditar sobre lo que el hombre es capaz de hacer y deshacer; sobre lo que la Comunidad Internacional es capaz de hacer y no hace; sobre la fuerza que tienen los intereses sobre las vidas; sobre la fuerza macabra de la ideología.
Todos los que escriben sobre el genocidio de Rwanda describen los fenómenos pero nadie llegará a leer los corazones de las víctimas y de los verdugos. Los fenómenos nos pueden conducir a la esencia de las cosas pero nunca llegaremos a captarla o mejor dicho a agotarla. Se nos escapa. Se puede contar los cadáveres pero nunca se puede contar los corazones rotos ni medir las lágrimas que vierten por dentro. El genocidio de Rwanda me ha confirmado en mi convicción de que el hombre es un misterio pero también es un ser pobre, muy pobre.